jueves, 14 de agosto de 2008

Madre, Niña dormida...
Ante el Icono de la Dormición
(14/15, ago., A.D. 2008)
Miguel Zavala-Múgica+
Dedicado a mi amigo
Gonzalo González Contreras,
de Cotija, Michoacán.

Mientras cae tu noche
-de Vísperas solemnes-,
suban mis oraciones
junto a tu Dormición.

Subes al Monte Santo
como Niña pequeña
recién nacida tu alma
para el Reino de Dios.

Cristo viene a llevarte
entre sus brazos, tierno,
¡quién como tú del Verbo
Madre, y hoy en sus brazos!

Quién como tú en tu muerte,
bendita Virgen Madre,
en los brazos de Cristo
tu alma a la gloria asciende.

Aún no en cuerpo y alma;
aún no, pues falta tiempo.
En tu sueño de muerte
quiero verme en la Vida...

Hija y Madre, señora...
...sierva, reina y esclava,
Virgen fiel, Madre buena...

Hoy que asciendes -pequeña-,
madura para el Reino,
entre las vesperales
luces del alto cielo...

...quiero mezclar mis sueños,
mi oración y mi ruego,
como suben las ascuas
de papel que se quema,

llévate, Madre Niña,
Virgen y Anciana a un tiempo...,
llévate entre tus manos
-hoy que dejas la tierra-,

las dichas y desdichas,
mis alegrías y duelos...
Y -cuando al fin me toque
el tercer nacimiento-,

dí a Jesús que no olvide
traer, para envolverme,
tu manto azul de estrellas:
¡tu caricia de cielo!


U.I.O.G.D.

La Gracia del Nuevo Nacimiento
¡¡En el Nortiii, si'Iñooor...!!
Pues "'Iñooorrr...", estos que ve usté en la primera foto, somos Los Tres Alegres Compadres: los presbíteros Serge Villalobos (La Ascensión, Matamoros, Tamps.), Miguel Zavala (Diócesis del Occidente), y Alejandro Morales (San Sebastián y Santa Ana, Río Bravo, Tamps.). Resulta que mi hermano y compañero del Seminario de San Andrés -allá por 1989-91-, el Padre Alejandro Morales Almanza -presbítero de la Diócesis del Norte de México-, ha bautizado a la más pequeña de sus hijos: Anna Sophía, y en la misma ceremonia bautizó también a su sobrina Marcela, una pequeña de once años, apadrinada por él y por su esposa Lolis -mi Comadrita chula.

Los presbíteros concelebrantes (desde la izq.) : Serge Villalobos, Miguel Zavala y Alejandro Morales, en el altar de la Iglesia de San Esteban, Río Bravo, Tamps. Este templo fue construido originalmente por el Pbro. Ramiro Delgado, actual Obispo de Cuernavaca.

El Padre Serge Villalobos -mi querido hermano-, Rector de la Iglesia de la Ascensión, en la cercana Matamoros fue invitado junto conmigo a formar parte del grupo de padrinos de Anna Sophía, con quien tenemos ahora un parentesco espiritual indisoluble, y un compromiso de formación en la fe y vida cristianas de por vida.

Mi hermano, compañero (y ahora comPadrecito) Alejandro+, es un sacerdote muy apreciado por su Obispo -el Revdmo. Marcelino Rivera, y sus compañeros y feligreses. El Padre Alejandro trabaja en las afueras de la ciudad de Río Bravo, en su natal estado de Tamaulipas, a 45 minutos -en coche-, de Matamoros y de la frontera con Brownsville, Texas. Ministra en dos congregaciones: San Esteban y Santa Ana, ambas en zonas marginales de Río Bravo, con unos calores estivales que sólo allá saben soportar con dignidad, y no como yo, que chorreé las vestiduras como monje chipriota... jejejeje...

No pienso hablar aquí de la hospitalidad y sincero afecto norteño, porque me vuelvo a acordar del cabrito, las costillas de res y de las tortillas de harina con las que subí los kilos que había bajado en el ayuno previo al viaje... jejeje... Ni hablaré del afecto de la congregación de la Ascensión -donde me secuestró mi hermano Serge+-, ni de su gente tan trabajadora, porque me vuelve a dar calor de sauna... (Saludos al "Profe", a Bertita, a Alfredo, a Emilia y Gabriel que son inmigrados desde San Martín de las Flores, por acá por Guadalajara, y a todas las familias conocidas).

¡¡No se me vayan...!!, que viene lo bueno...

Una Catequesis de la Iniciación Cristiana.

Primer Paso.- El Baño del Nuevo Nacimiento.


La pequeña Anna Sophía recibe la administración del Santo Bautismo de manos de su papá, el Presbítero Alejandro Morales.

El agua es elemento de vida y de muerte, significa "Tumba y madre" Tafós kaí Mêter, como reza una inscripción griega en la fuente bautismal de la Catedral de San Juan de Letrán en Roma. En el agua somos consepultados con Cristo en su Muerte, y a partir de ella surgimos triunfantes, uniéndonos a su Resurrección.

El Bautismo (baptêsis / báptisma) -que literalmente significa "inmersión"-, no se permitió administrarse por ablución (como vemos en la foto), sino hasta muy entrada la Edad Media. La triple inmersión -o triple ablución-, en el Nombre de cada una de las Personas de la Trinidad, se hizo obligatoria desde el Concilio de Nicea, en el año 325.

También Marcela, de once años, recibió el Baño del Nuevo Nacimiento.

Los adultos, y los niños mayores -quienes pueden responder por sí mismos-, renuncian al Mal y profesan su fe en Cristo. El Bautismo de párvulos (niños chiquitos), se llama Paidobautismo, y -aunque usted no lo crea, comenzó como una concesión que la Iglesia hacía a los padres, para que incluyesen a sus hijos como cristianos, y para enfatizar que Dios nos hace sus hijos por Gracia, sin esfuerzo nuestro, sin embargo, la Fe es necesaria para profesar este sacramento, por ello todos -los niños también-, somos bautizados EN la Fe de la Iglesia.

Sin embargo, toda la desesperación medieval por el fantasioso limbo y el destino de los niños muertos sin bautizar, comenzó hasta muy entrada la Edad Media, aunque halla sus orígenes en las especulaciones de San Gregorio Nacianceno, acerca de la vagancia de las almas sin bautismo, lo cual tiene más qué ver con la cultura pagana hacia el siglo IV, que con la confianza que un cristiano debe sentir en Aquél que "murió y se entregó por nosotros" .

Padrinos o Fiadores: ¿pa'qué?

Marcela, amadrinada por Lolis, esposa del Padre Alejandro.

Los padrinos -más correctamente denominados Fiadores (de Fides, fe, en latín)-, no son sólo los sustitutos de los papás en caso de que los ahijados queden en el abandono, o en necesidad; ni mucho menos su función se reduce a cuestiones de índole material. En la Iglesia antigua -¡¡y hoy también!!-, los fiedores o padrinos, son aquellos miembros de la Comunidad Cristiana que atraen, animan y acompañan a un nuevo cristiano en su caminar. Quienes conocen el sistema de "Padrinos" de Alcohólicos Anónimos, sabrán de lo que hablo; se trata de compañeros de camino, que no te dejan caer, que te buscan, velan por ti, y ejercen un... ¡¡Compañerismo Cristiano!! Eso, y no únicamente compadrazgo, es la función de los padrinos bautismales.

Segundo Paso.- Unción Crismal.

El Padre Miguel (quien, por cierto, está en vías de ser una de las "cabezas más brillantes" de la Iglesia, como se ve en la foto...), se dispone a ungir con el Santo Crisma a la pequeña Anna Sophía:

El Bautismo ha recibido diversos nombres, como.- Iluminación, Nuevo Nacimiento, Iniciación Cristiana; este último nombre se ha conservado en los manuales de liturgia de las Iglesias Cristianas, y es el más correcto, porque permite visualizar la Iniciación en el Misterio de Cristo como un todo constituido por tres partes: 1. El Baño del Nuevo Nacimiento; 2. La Imposición de manos y Unción Crismal, y 3. La Santa Comunión.

Indebidamente, quizá, la Iglesia Occidental separó la Unción del resto de la Iniciación, con lo cual se dio origen al rito de la Confirmación, que en el Medioevo se administraba sólo por el Obispo, después del Bautismo, aunque no necesariamente en una edad apropiada de mayor razonamiento. Actualmente, el Libro de Oración Común de la Iglesia Episcopal y de la Iglesia Anglicana de México, han reunido de nuevo las tres partes de la Iniciación: Baño, Unción y Comunión.

Sin embargo, el Reformador alemán Martín Lutero aprovechó la situación creada en el Medioevo, y organizó el Rito de la Confirmación para que fuese una auténtica Reafirmación Madura de la Fe (nombre que estuvo ¡¡a punto!! de usarse para sustituir el de Confirmación en el Libro de Oración de 1979, que actualmente usamos. Las Iglesias Anglicanas tenemos una larga tradición de Educación Cristiana de uno o más años, previa a que reafirmen su fe los adultos o niños mayores de DOCE años. (¡Sería bueno volver a ella, allí donde se tuviere olvidada...!). Por supuesto, el Obispo es el ministro de la Confirmación, tomada en este sentido; pero la ceremonia de la Unción Crismal, ha vuelto a ser parte de la Iniciación Cristiana administrada por los presbíteros.

Revestida de Luz: revestida de Cristo.

Anna Sophía, revestida de Luz, revestida de Cristo.

Ninguna vestidura litúrgica cristiana se encuentra registrada en la Biblia (las vestiduras de los sacerdotes hebreos sí lo están, en el Levítico). Únicamente la vestidura blanca bautismal parece mencionada por San Pablo, en la Carta a los Gálatas: "Todos ustedes, los que han sido bautizados en Cristo, de Cristo mismo se han revestido...".

La vestimenta de una persona, refleja o que esa persona es y hace en la vida, habla de su edad, de su sexo, de sus preferencias en la moda, de su nivel económico, de su ocupación, y a veces hasta de su malicia o bondad. Sin embargo, San Pablo dice que Dios no hace diferencias entre sus hijos, y que ya no importa el ser "judío o griego, esclavo o libre, varón o mujer..." Ahora, Dios nos reviste de luz, de inocencia... ¡de Cristo, pues! Cristo es ahora nuestro MODO DE VIDA, por eso es nuestra vestimenta. Si Cristo es nuestro Maestro, entonces nos exige que le sigamos y nos asimilemos a Él.

También, por ello, se entrega al neófito una lámpara encendida en el Cirio Pascual, que representa a Cristo Resucitado. Es la estafeta con la que el Caudillo de nuestra nueva vida espera encontrarnos cuando vuelva por nosotros, de aquí que en muchas celebraciones sacramentales, encendamos candelas, incluso en nuestro lecho de muerte, porque todas son etapas de la misma Vida en Cristo que ha comenzado en el Bautismo.

El Bautismo nos incorpora a la Iglesia.

Anna Sophía, Marcela... : "Nosotros te recibimos en la Familia de Dios..."

El Libro de Oración contiene un rito bellísimo durante la Iniciación Cristiana, mediante el cual la comunidad presente -toda, a una voz-, hace patente su recepción de la persona que recién ha sido iluminada y renacida en el Bautismo.

"Nosotros te recibimos en la familia de Dios. Confiesa la fe de Cristo crucificado, proclama su Resurrección y participa con nosotros en su sacerdocio eterno."

Y luego le preguntamos a las personas si saben que ellas y ellos son sacerdotes... ¡Claro que lo son!, el Bautismo nos hace a todos sacerdotes, pues nos une, nos hace parte del Cuerpo Místico del Único Gran Sumo Sacerdote: Jesús, quien por nosotros expió nuestros pecados en la Cruz y nos comunica la Gracia: Vida de Dios en nosotros.

Tercer Paso.- La Santa Comunión.

El Cuerpo de Cristo, Pan del Cielo: El Padre Serge Villalobos, ministra la Santa Comunión por primera vez a Marcela.

La tradición anglicana, siguiendo la regla establecida por el Arzobispo Tomás Cranmer en el Orden de Comunión de 1548, y en el Libro de Oración de 1549, establece que la Santa Comunión del Cuerpo de Nuestro Señor, se reciba en la mano -justo como en la foto vemos que hace Marcelita-, colocamos las manos en cruz, recibiéndolo reverentemente, llevándolo directamente a la boca, ya de pie o de rodillas. Otros documentos más antiguos -como la Tradición Apostólica de Hipólito de Roma (s. III)-, dan fe de la antigûedad de esta costumbre.

La Sangre de Cristo, Cáliz de Salvación: El Padre Alejandro Morales ministra la comunión a Anna Sophía, en brazos de su madrina ¿Sandra o Elisa?, son dos señoras que son gemelas... yo ya no supe cuàl fue cuál...

El Cáliz de la Sangre del Señor se ministra apropiadamente en las manos del comulgante, quien lo toma cuidadosamente y lo lleva a su boca. Lamento muchísimo decirlo (y que pueda haber quien se moleste), pero la verdad es que la costumbrita de la intinción hecha por el propio comulgante, es un abuso que se debe a la falta de ganas de algunos clérigos por enseñar correctamente a su gente.

Únicamente el ministro del Cáliz, sea un Obispo, Presbítero, Diácono, o un Ministro Laico, es la persona autorizada a efectuar la intinción (mojar el Pan en el Vino consagrados).

La comunión a un bebito está plenamente autorizada en las Iglesias de la Comunión Anglicana, a la usanza oriental y de la Iglesia primitiva; debe hacerse con el consentimiento de los papás, dadas las circunstancias culturales de los países latinos, y puede efectuarse usando una cucharilla perfectamente limpia, o un gotero (basta una gotita, en el caso de un bebé de meses), ambos instrumentos deben considerarse y guardarse como vasos sagrados.

"¡Salgamos con gozo al mundo, en el Poder del Espíritu!"

Alegría en Cristo...

Bienvenidas a la Familia de Dios...

Anna Sophía en brazos de sus papás, el Padre Alejandro y Lolis: El matrimonio del clero quedó restaurado en la Iglesia Occidental através de la Tradición Anglicana, y -al igual que el celibato (cuando se acepta libremente), no es ni un impedimento, ni un requisito para ejercer el ministerio ordenado, simplemente puede ser una bendición o un tropiezo, depende de lo que sepamos (o no sepamos) hacer con él en nuestras vidas.

Uy qué orgulloso padrino... : ...Ajá, Padre Miguel, ¡y qué responsabilidad!, a ver cómo le haces para ser buen padrino de Guadalajara hasta Río Bravo...

U.I.O.G.D.

Bajo tu amparo...

Bajo tu amparo nos acogemos,
Santa Madre de Dios;
no deseches las oraciones
que te dirigimos en nuestras
necesidades;
antes bien, líbranos
de todo peligro...
¡Oh Virgen gloriosa y bendita!

Se dice que esta oración copta (cristiana egipcia del siglo III), es la más antigua que se conoce, dedicada a la Madre del Señor.

Icono de la Theotókos: (temple al huevo, sobre madera), Escuela de Salónika, Grecia, s. XIV.




Fresco en la Catacumba de Santa Priscila: Roma s.III, quizá el más antiguo en que se representa a la Madre y al Niño, aunque es posible que representara más bien a la Iglesia-Madre (la comunidad cristiana), que a María.
U.I.O.G.D.