CALENDARIO DE FIESTAS MENORES

Francisco de Asís
Religioso, Diácono, 1226.

De Wikipedia: La Enciclopedia Libre.

Traducido y aumentado por el
Padre Miguel Zavala-Múgica+


Francisco de Asís (nacido Giovanni Bernardone; 1181 / 1182 – Octubre 03, 1226) [2] fue el fundador de un grupo de cristianos comprometidos que posteriormente fue conocida como la Orden de Hermanos Menores, más comúnmente conocidos como Franciscanos.

Pocos santos en la Iglesia Cristiana han llevado un testimonio de vida tan asombrosamente cercano a la imitación del propio Jesucristo, como es el caso de Francisco de Asís. Su persona trasciende incluso la burocracia y pesantez del Papado, y su figura es amada y venerada lo mismo dentro de la Iglesia Católica Romana que en otras cristiandades, como la Comunión Anglicana, la Iglesia Ortodoxa, la Iglesia Luterana y algunas ramas protestantes de la única Iglesia de Cristo.

Arriba: San Francisco de Asís.- Fresco en el monasterio benedictino de Sacro Speco, en Subiaco, Italia. El vínculo entre benedictinos y franciscanos, se dio a través de los primeros espacios para la vida espiritual de Francisco y sus compañeros, sin embargo, la espiritualidad de Francisco añadió un nuevo carisma fraternal a la vida monacal; de aquí que a religiosos como los franciscanos se les llame comúnmente "frailes" (de frater = "hermano", en latín), y no "monjes", palabra que subraya el carisma de soledad y aislamiento.

Es ampliamente conocido como santo patrono de los animales, del medio ambiente y de Italia como país; es costumbre en muchas iglesias celebrar una bendición de animales en un día cercano al de su fiesta litúrgica, el 04 de octubre [3].

El Greco 1580–85: San Francisco en oración.

Niñez y juventud adulta.

Francisco fue uno de los siete hijos de Pietro di Bernardone, rico comerciante de telas, y de su esposa Pica Bourlemont, acerca de la cual poco se sabe, salvo que era oriunda de Francia [4] . Pietro estaba de viaje de negocios en Francia cuando nació Francisco, de modo que Pica le había bautizado como Giovanni di Bernardone [3] en honor de San Juan Bautista, en la esperanza de que –cuando creciera-, llegase a ser un gran líder religioso. Cuando su padre regresó a Asís, se puso furioso por ello, porque no estaba dispuesto a aceptar semejante destino para su hijo, y decidió llamarle “Francesco” (pronúnciese “Franchesco”), en honor a su éxito comercial y a su entusiasmo por todo lo que se relacionaba con Francia y lo francés [5] .

De joven, Francesco —o Francisco, como se le conoce en castellano—, se hizo trovador y escribió algo de poesía en francés [2] [5]. Según parece, su juventud fue la de un “hijo de rico” dedicado a cultivar a sus amigos ricos, a vivir cómodamente del dinero de su padre, y a la búsqueda ávida de toda clase de placeres [4], sin embargo, también parece que su desilusión por la fatuidad de lo mundano, también le vino muy tempranamente en su vida.

Un relato sobre la vida juvenil de Francisco, dice que mientras vendía terciopelo y otras telas de su padre, en la plaza de su ciudad, llegó un mendigo que le pidió limosna. Al final del día, Francisco dejó a un lado sus ventas y se fue tras el mendigo; cuando al fin lo halló, Francisco se vació las bolsas y le dio cuanto traía consigo, con lo cual se convirtió en blanco de las burlas de sus amigos, así como de la ira de su padre [6] .

En 1201, se unió a una expedición militar contra la ciudad de Perugia, fue tomado prisionero en Collestrada, y se pasó cautivo un año entero [7]. Es probable que este tiempo de reclusión haya influido en su posterior conversión de vida. A su retorno a Asís, en 1203, Francisco regresó a su vida desenfadada. Pero en 1204, una seria enfermedad le llevó a una profunda crisis espiritual. En 1205, Francisco se fue a Puglia para enlistarse en el ejército del Conde de Brienne. En Spoleto, una extraña vision le hizo regresar a Asís [2] .

José de Ribera (El Españoleto): San Francisco de Asís.

Se dice que, a partir de entonces, comenzó a evitar los deportes de caballería de su época, así como las fiestas con sus antiguos compañeros; éstos le preguntaban si acaso estaba considerando casarse, a lo cual, Francisco respondía: “Sí, se trata de la más bella novia que cualquiera de ustedes haya podido ver…”. Se refería a su “Dama Pobreza”. Pasó mucho tiempo en lugares solitarios, rogando a Dios que le iluminase. Probó paulatinamente con varios géneros de actividades, como atender leprosos, las víctimas más socialmente repulsivas de enfermedad alguna en aquella época, en lazaretos cercanos a Asís. Es famosa la anécdota que cuenta que en una peregrinación que hiciera a Roma –al ver a un leproso-, se venciera a sí mismo, y al natural asco y repulsión, corriendo a besarle las llagas al enfermo, como a Cristo mismo. En Roma mismo, pidió limosna para los pobres a las puertas de las Iglesias.

Más tarde, dijo haber tenido una visión de Jesús en la iglesia de San Damiano a las afueras de Asís, en la que el Ícono de Cristo Crucificado le habría hablado, diciéndole por tres veces: “Francisco, Francisco, reconstruye mi Iglesia, que se cae en ruinas.” Francisco pensó que se trataba de la capilla ruinosa en la que estaba la imagen. Así pues, vendió su caballo y algunas de las telas de la tienda de su padre, para ayudar al sacerdote local en este propósito [2][8].

"Francisco, Francisco, reconstruye mi iglesia que se cae en ruinas...":

Francisco atendió a un llamado de Cristo a través de un ícono del Señor crucificado. Como suele ocurrir hasta el presente con algunos líderes de iglesias, Francisco equivocó el sentido de la petición y se puso a reconstruir el derruido templo de San Damián -y otros más que estuvieron a su alcance-, pero pronto rectificó y entendió que lo que Cristo desea es la reconstrucción de Su Iglesia, de su Comunidad.

Fresco de Giotto di Bondone en la Basílica de Asís.

Crucifijo de San Damiano, El Cristo que "habló" a San Francisco:

Este icono es un temple al huevo sobre tabla, manufactura de monjes sirios residentes en Italia. Su modelo se conoce como "cruz habitada". Las imágenes de Cristo en la Cruz provienen del Oriente cristiano, donde Jesús es representado como "flotante" en la Cruz, triunfante y reinante desde ella; no fueron comunes en Occidente sino hasta el siglo XI, donde -al principio-, se les miraba con escándalo y recelo por parecer que representaba a un Cristo demasiado humano y sufriente. Francisco y la espiritualidad que él y su comunidad produjeron, ayudarían -para mejor o para peor-, a reforzar el culto a la humanidad de Cristo.

Pietro, indignadísimo, intentó hacer cambiar de opinión a Francisco, primero por la persuasión, y después por medio de castigos corporales. En una entrevista final, en presencia del Obispo diocesano, Pietro increpó a su hijo, diciéndole que todo cuanto tenía lo había recibido de él, como padre, y de su trabajo; y que los bienes con los que daba limosna con imprudente largueza, eran de su padre y no de él. Francisco –en un gesto de la más libre decisión personal-, renunció a su propio padre y a su patrimonio, y ante la atónita mirada de los presentes, se desnudó por completo de cuanta ropa, bolsas y dinero llevaba consigo, y que de su padre había recibido.

La renuncia a los bienes:

Un airado Pietro Bernardone arremete contra su hijo Francisco, mientras el Obispo Guido de Asís cubre pudorosamente al denudado Francisco que ha renunciado

incluso a su padre mismo.

Fresco de Giotto di Bondone, Basílica de Asís:

Giotto -a pesar de ser ya un pintor pre-renacentista-, sigue los cánones del arte sacro bizantino, con trazos esquemáticos y actitudes hieráticas; colores simbólicos, y trazos esquemáticos para los escenarios (obsérvese la sencillez de líneas en los edificios). La escena es imaginada en un exterior y para no dejar duda alguna, las personas son representadas revestidas de forma inequívoca; el obispo (con alba, capa y mitra, como si asistiera a un Te Deum), y los comerciantes -por ejemplo-, llevan las vestiduras que les habrían distinguido en una gran ceremonia, pero no en una escena casual, como ésta.

Por los siguientes dos meses, viviría como mendigo en la región de Asís, para luego volver a su ciudad para quedarse allí dos años. En ese tiempo, se dedicó –juntó con amigos que fue ganando al paso-, a la restauración de varias Iglesias, entre las cuales estuvo también la muy famosa, conocida como “la Porciúncula” (Porziúncola), o “pequeña porción”, que era la antigua capilla de Santa María de los Ángeles [8] .

La Porciúncula o primera iglesia de San Francisco.

Fundación de los Hermanos Menores.

Al fin de este período (según Jordanus, el 24 de Febrero de 1209), Francisco oyó un sermón basado en San Mateo 10:9, que le cambiaría la vida., en este pasaje, Cristo dice a sus discípulos, que para predicar el Reino de los Cielos, habrían de seguirlo sin llevar dinero ni bienes, ni aún un bastón, ni ropa o zapatos extra para el camino [2] Francisco se inspiró para dedicarse a sí mismo a la vida de pobreza [2] .

Envuelto en un rudo sayal, con un calzado sumamente pobre, comenzó a predicar en Evangelio [2]. Pronto lo siguió su primer compañero, el jurista Bernardo di Quintavalle, quien contribuyó con todo cuanto tenía para sostener a ambos. Al fin del año siguiente, ya Francisco tenía once seguidores. Francisco no buscó las órdenes sagradas (aunque luego se viera forzado a aceptar el diaconado), de modo que los miembros de la comunidad eran “hermanos menores” (fratres minores, en Latín) [2].

Los hermanos vivían una vida simple en el abandonado lazareto de Rivo Torto cerca de Asís; pero pasaban mucho de su tiempo deambulando por los montañosos distritos de Umbria, siempre llenos de una inusual alegría y en una actitud generosa, dejando una fuerte impresión en los que les oían cantar y predicar [2] .

En 1209 Francisco y sus once primeros seguidores, fueron a Roma para obtener el permiso del Papa Inocencio III para vivir en comunidad en el seno de la Iglesia Católica Romana [9] . Al entrar en Roma, los hermanos se encontraron con el Obispo Guido de Asís, quien se hallaba en compañía de Giovanni di San Paolo, Cardenal y Obispo de Sabina. El Cardenal, que había sido confessor del Papa Inocencio III, simpatizó de inmediato con Francisco y accedió a representar sus intereses ante el Papa. Renuente al principio, Inocencio aceptó recibir a Francisco y a su comunidad al día siguiente, luego de varios días, el Papa accedió a admitir al grupo de manera informal, añadiendo que cuando Dos se sirviera acrecentar el grupo en gracia y número, entonces podrían pedir una admisión oficial. Los miembros del grupo fueron todos tonsurados y Francisco ordenado diácono, permitiéndosele así leer públicamente y en voz alta el Evangelio en la Iglesia [10] .

La discusión permanece abierta acerca de las consecuencias que tuvo, tanto para el ideal de Francisco, como para la Iglesia Occidental –como un todo-, la decisión de éste de pedir autorización a Roma, como la decisión de Inocencio III de recibir a Francisco y a su comunidad en la Iglesia. Por una parte, la Iglesia europea medieval del siglo XI era rica y poderosa, pero perdía credibilidad ante el pueblo, y el propio Inocencio III enfrentó –ahogándola en sangre-, la crisis del movimiento religioso cismático y herético de los cátaros en el Languedoc (mediodía francés), y a los nobles que lo apoyaban.

Giovanni de San Paolo e Inocencio III parecen haber dado un golpe de maestría política –que caracteriza a la Iglesia Católica Romana de siempre-, al admitir a Francisco y a sus compañeros como un modo y opción de vida autorizados dentro de la Iglesia Occidental: “¿quieres pobreza?: aquí te podemos ofrecer una opción autorizada…” Con ello se dejaba en paz la acumulación de poder y riqueza dentro del alto clero, mientras –por otra parte-, se aumentaban las opciones de vida, y espiritualidad dentro de una Iglesia vista y deseada como universal.

El Sueño de Inocencio...

Inocencio III sueña que sólo San Francisco sostiene la derruida Iglesia de Cristo.

Fresco de Giotto di Bondone 1267-1337 Basílica de Asís.

El hieratismo bizantino que aún conservan las figuras de Giotto, sólo es igualado por la admirable candidez -a la vez procedente del arte del Oriente cristiano-, de las figuras. Como para que todo aquel que vea este fresco sepa quién es el Papa, Inocencio III duerme revestido incómodamente con todas sus vestiduras pontificias: alba, estola, capa, guantes y hasta la pesada tiara. Los cortinajes indican que se trata de una escena interior.

Al convertir el ideal de Francisco y sus compañeros en una orden religiosa semi-monástica (su carácter mendicante la sacaba de la tradición continua del monacato benedictino), lo que en el fondo ocurría, era que se sometía el movimiento al control central de Roma. Idéntica cosa sucedía al clericalizar a Francisco, ordenándolo (al menos) como diácono y sometiéndolo así a la disciplina clericalis.

Inocencio III aprueba -pro témpore- la vida comunitaria de Francisco y sus amigos. Fresco de Giotto di Bondone, Basílica de Asís.

El encuentro entre Francisco e Inocencio, es el encuentro entre la fuerza del ideal y la estabilidad de la institución; lo nuevo y lo antiguo. Uno y otro se buscan mutuamente, como dos columnas que soportan un arco en dos ángulos diferentes; pero el uno representa la aniquilación del otro: para subsistir ambos –sin traicionarse mutuamente-, se requiere un fino equilibrio difícil de mantener.

Vida posterior: Viajes misioneros y origen del primer “Nacimiento”.

La comunidad creció, a partir de entonces, y las vocaciones aumentaron [11]. Luego de escuchar a Francisco predicar en la iglesia de San Rufino en Asís, in 1209, Clara de Asís se sintió profundamente tocada por su mensaje [11]; su hermano, Rufino, se unió también al movimiento, ahora convertido en orden religiosa.

El Domingo de Ramos, 28 de marzo de 1211, Francisco recibió a Clara en la Porciúncula y allí estableció la Orden de Damas Pobres, posteriormente llamada, de las Clarisas Pobres [11]. El mismo año, Francisco partió hacia Jerusalén, aunque su barco naufragó a causa de una tormenta, en las costas de Dalmacia (Yugoslavia), obligándole a regresar a Italia.

El 08 de mayo de 1213 Francisco recibió en donación el monte La Verna (Alverna), del Conde Orlando di Chiusi quien lo escribía como “eminentemente apropiado para quienquiera que desee hacer penitencia en un lugar remoto, apartado de la humanidad”[12] [13] . Esta montaña sería uno de los lugares favoritos de Francisco para apartarse en retiro y oración [13] . El mismo año, Francisco zarpó para Marruecos, pero una enfermedad lo dejó atorado en España.

De regreso en Asís, se le unieron varios nobles (entre ellos Tommaso da Celano, quien más tarde sería su biógrafo) y algunas otras personas de elevada educación.

En 1215, Francisco fue a Roma a asistir al IV Concilio Laterano. Probablemente haya sido en ese tiempo que conociera a Domingo de Guzmán [1]. En 1216 Francisco recibió del Nuevo Papa Honorio III, la confirmación de la “indulgencia” para quienes visitaran la iglesia de la Porciúncula, conocida también como el “Perdón de Asís”, con el que el Papa decretaba la total remisión de pecados de quienes visitaran ese templo. La obra de Francisco quedaba totalmente inmersa en el sistema organizacional romano.

En 1217 la creciente congregación se dividió en dos provincias; y así se enviaron grupos a Francia, Alemania, Hungría, España y el Medio Oriente.

San Francisco ante el Sultán. La prueba de pasar por el fuego.
Fresco de Giotto di Bondone 1267-1337 Basílica de Asís.

En 1219, Francisco salió con algunos compañeros, en una peregrinación no-violenta a Egipto. Atravesando las líneas entre el sultán y los Cruzados en Damieta, Francisco fue recibido por el Sultán Melek-el-Kamel [14][1]. Se dice que Francisco desafió a los estudiosos musulmanes a probar la verdadera religión mediante el fuego; pero éstos se negaron [1]. Cuando Francisco propuso entrar él primero al fuego bajo la condición de que el fuego no lo dañaría, se dice que el Sultán hubo de reconocer a Cristo como verdadero Dios. El Sultán quedó tan impresionado, que permitió a Francisco predicar a sus súbditos [1][15]. Aunque Francisco no tuvo éxito en convertir al sultán, las últimas palabras del sultán a Francisco, fueron –según Jacques de Vitry, Obispo de Acre, en su libro Historia occidentalis, De Ordine et praedicatione Fratrum Minorum (1221) : “Ora por mí, para que Dios se digne revelarme la Ley y la Fe que más le placen” [16] .

En Acre, capital de los Cruzados a la cual pertenecía el Reino de Jerusalén, Francisco se reunió con los hermanos Elia y Pietro Cattini; probablemente entonces haya visitado los Santos Lugares, alrededor de 1220.

Aunque ya existían íconos sobre la Natividad de Cristo, Francisco colocó lo que habría de ser el primer “Nacimiento” tri-dimensional, llamado también: presepio o “pesebre”, en Italia o crèche, en Francia, o bien “Belén”, en España (vid. Nativity scene). Esto tuvo lugar en el pueblo de Greccio cerca de Asís hacia 1220 [17]. Francisco colocó un cuadro plástico usando personas y animales reales, para crear una escena viviente, de modo que los fieles pudieran contemplar el Nacimiento del Niño Jesús de una manera directa, hacienda uso de los sentidos, especialmente de la vista [17] . Tomasso da Celano, biógrafo tanto de San Francisco como de San Buenaventura cuenta cómo usó un sencillo pesebre, entre un buey y un asno auténticos [17]. Según este autor, era bello, en toda su simplicidad, cómo el pesebre se convertía en altar para aquella Eucaristía de Navidad.

San Francisco coloca al Niño Jesús (un bebé real), en el primer pesebre navideño. La escena, montada en el santuario del templo, junto al altar (derecha), donde se está celebrando la Eucaristía, muestra la parte trasera del iconostasio, y del crucifijo que lo remata, exhibiendo, así, con inusual realismo, un aspecto poco "deseable" en la iconografía convencional. El buey y el asno -en tanto que figuras menores-, aparecen sumamente reducidos de tamaño, pese a que -según las crónicas-, se trataba de animales reales.

Fresco de Giotto di Bondone, Basílica de Asís.

Al recibir noticias del martirio de los hermanos en Marruecos, Francisco regresó a Italia por Venecia [18]. El Cardenal Ugolino di Conti había sido nombrado por el Papa como protector de la orden. Al regreso de Francisco, se encontró con que la orden había tomado más la estructura de una orden monástica tradicional, con biblioteca, edificios propios y un acomodo a los intereses generales de la jerarquía.

Al parecer se hizo necesaria una Regla monástica más detallada, y el 29 de septiembre de 1220 Francisco quedó fuera del control y gobierno de la orden, debiendo dejar su puesto como superior en manos de Pietro Cattini. Sin embargo, éste murió el 10 de marzo de 1221, y fue enterrado en la Porciúncula, seguido de lo cual se sucedió una serie de “milagros” (en la misma tumba) atribuidos al recién muerto. Con ello, las mareas de gente que llegaba a orar al templo, hicieron imposible la vida de los religiosos. Se dice que Francisco oró, pidiendo a Pietro que dejase de hacer milagros “obedeciendo éste en la muerte como había obedecido en vida”. Los milagros cesaron y Pietro fue sucedido por su hermano Elía como vicario de Francisco.

Entre 1221 y 1222 Francisco atravesó Italia, hasta Catania, en la isla de Sicilia, al sur y luego hasta Bologna, en el extremo norte.

El 29 de noviembre de 1223,la edición final de la regla de la orden estaba lista; constaba de doce capítulos y fue aprobada por el Papa Honorio III.

Francisco recibe los estigmas de Cristo.

Fresco de Giotto en la Basílica de Asís.

Mientras oraba en el monte Alverna, durante un ayuno de cuarenta días en preparación para el Día de San Miguel (29 de septiembre), se dice que hacia el 14 de septiembre de 1224 (Fiesta de la Exaltación de la Santa Cruz, Francisco tuvo una visión, como resultado de la cual recibió los estigmas o llagas de Cristo en manos, pies y costado [19]. El Hermano León, que había estado con Francisco en el momento, dejó un claro y simple recuento del fenómeno de la estigmatización [2][19]:

"De pronto, contempló la visión de un serafín, un ángel de seis alas en una cruz. Este ángel le dio el don de las cinco llagas de Cristo." [19]

Sufriendo de estos estigmas, así como de una enfermedad ocular, Francisco fue atendido en varias ciudades (Siena, Cortona, Nocera) sin obtener mejoría. Al final fue llevado a la Porciúncula y al anexo llamado “tránsito”, área para frailes enfermos. Allí, en el lugar donde todo comenzara, sintiendo aproximarse su fin, pasó sus últimos días con sus hermanos, dictando su testamento espiritual. Murió la noche del 03 de octubre de 1226 cantando el Salmo 141.

El 16 de julio de 1228 fue canonizado por el siguiente Papa --Gregorio IX-, el antiguo Cardenal Ugolino di Conti, amigo y protector de los hermanos menores. Al día siguiente, el Papa mismo colocó la primera piedra de la Basílica de San Francisco en Asís.

El cuerpo de Francisco fue depositado el 25 de mayo de 1230 bajo la Basílica Menor. El lugar preciso de su enterramiento permaneció inaccesible hasta que fue redescubierto en 1818. Pasquale Belli construyó para los restos del apóstol de la pobreza y el desprecio de los bienes materiales y de la propiedad privada, una cripta en estilo neo-clásico, que fue subsecuentemente remodelada y vuelta a adornar y a embellecer con costosos mármoles, entre 1927 y 1930 hasta darle su forma actual, bajo Ugo Tarchi. En 1978, los restos de Francisco (sólo Dios sabe si reales o no), fueron identificados por una comisión de estudiosos nombrada por el Papa Pablo VI y colocados en una fina urna de cristal dentro la tumba de piedra.

San Francisco ha sido considerado como el primer poeta italiano que se conoce, por los críticos literarios. Francisco creía que las personas comunes debían tener la posibilidad de dirigirse a Dios en su propia lengua, de modo que escribió siempre en italiano, en el dialecto de Umbria, mejor que en Latín. Sus escritos se consideran de valor literario, pero de aun más grande valor moral [20] .

Día de Fiesta.

El día de Fiesta de San Francisco, se celebra el 04 de octubre. Además de esta fiesta, una segunda celebración se observa entre los Católicos Romanos Tradicionalistas y entre los Franciscanos de todo el mundo, en honor de sus Estigmas el 17 de septiembre (La Impresión de los Estigmas de San Francisco, Confesor, véanse: Calendario General Romano en 1954, el Calendario General Romano del Papa Pío XII, y el Calendario General Romano de 1962).

San Francisco, la naturaleza y el medio ambiente.

Muchas de las historias que rodean la vida de San Francisco, tienen qué ver con su amor por los animales y los otros seres de la naturaleza, a quienes consideraba hermanos por nuestra común creación en Dios [21]. Quizá el más famoso incidente que ilustra la humildad del santo hacia la naturaleza, sea aquel que aparece en las Fioretti (Florecillas), colección de leyendas en torno a la vida de San Francisco. Un día, mientras Francisco viajaba con compañeros suyos, muchos pajarillos llenaban los árboles a la orilla del camino. Francisco pidió a sus compañeros:

“Esperadme mientras voy a predicar a mis hermanas, las aves” [21].

Predicación de San Francisco a las aves.

Fresco de Giotto di Bondone, Basílica de Asís.

Los pájaros le rodearon, atraídos por el poder de su voz, ninguna huyó. Francisco les habló:

Hermanas mías, aves, debéis mucho a Dios, y debéis siempre y en todo lugar tributar alabanza a Él; porque É los ha dado libertad para volar por los cielos, y… Él os ha vestido… de modo que ni sembréis ni cosechéis, y Dios os alimenta y os da ríos y fuentes para vuestra sed, y los altos árboles para vuestros nidos. Y aunque no sabéis ni hilar ni tejer, Dios os viste a vosotras y a vuestros hijos, porque el Creador os ama en gran manera, y os bendice abundantemente. Por lo tanto buscad siempre alabar a Dios.

Otra leyenda de las Florecillas, habla de la ciudad de Gubbio, donde Francisco vivió por algún tiempo y donde había un lobo “terrible y feroz que devoraba lo mismo a personas que a animales” (vid. Lobo de Gubbio). Francisco tuvo compasión de la gente del pueblo, y se fue a las Colinas a encontrar al lobo. Al poco tiempo, el temor a la fiera hizo huir a sus compañeros, a pesar de las reconvenciones de Francisco. Al hallar al lobo, hizo la señal de la cruz y mandó al lobo venir hacia él sin herir a nadie. Milagrosamente, el lobo cerró las fauces, y se echó a los pies de Francisco:

“Hermano Lobo, has hecho mucho daño, por estos rumbos haciendo gran mal…” Toda esta gente te acusa y te maldice… Pero, hermano Lobo, me gustaría hacer la paz entre esta gente y tú.”

Cuando Francisco llevó al lobo al pueblo, fue rodeado por los atónitos habitantes, hizo una alianza entre ellos y el lobo. Y puesto que el lobo “había hecho mal por hambre”, los habitantes del pueblo se comprometían a alimentarlo regularmente, y a cambio, dejaría de hacer presa de ellos y de sus ganados. De esta manera, Gubbio fue liberado de la amenaza del depredador. Francisco -siempre amigo de los animales-, aun hizo alianza con los perros del pueblo, de que no molestarían más al lobo. También se dice que Francisco –para mostrar a la gente del pueblo que no debían hacerle daño, se atrevió a bautizar al lobo. Estas leyendas ejemplifican el modelo franciscano de caridad y pobreza, así como el amor de Francisco por el mundo natural [22] .

Gran parte de la apreciación de Francisco por la naturaleza como creación de Dios, se halla Cántico del Sol, un poema escrito en italiano-umbrío en unos 1224 versos, que expresa el amor y aprecio por el “Hermano Sol”, la “Hermana Luna”, la “Madre Tierra”, el “Hermano Fuego”, la “Hermana Agua”, etc. Y todas las creaturas de Dios personificadas en sus formas fundamentales. En el Cántico de las Creaturas, Francisco escribió:

“Toda alabanza a ti, Señor, por todos estos hermanos y hermanas creaturas.” [3]

La actitud de Francisco hacia el mundo natural, aunque poéticamente expresada, fue convencionalmente cristiana [4] . Francisco creía que el mundo había sido creado bueno y bello por Dios, pero que sufría la necesidad de redención a causa del pecado humano. Él predicó a humanos y animales la universal capacidad y deber de todas las creaturas de alabar a Dios (tema común en los Salmos) y el deber del ser humano de proteger y disfrutar la naturaleza como mayordomo de la creación de Dios, tanto como creatura él mismo [21].

La leyenda dice que –en su lecho de muerte-, Francisco le dio gracias a su burrito por haberlo ayudado y llevado toda su vida, y el burrito lloró. Otras glosas, indican que Francisco llamaba “hermano asno” a su propio cuerpo, en el cual su alma había habitado y se había movido durante su vida.

San Francisco en otros medios.

1. La película de Franco Zeffirelli: Hermano Sol, Hermana Luna

2. La ópera de Olivier Messiaen, Saint-François d'Assise

3. Francesco (1990), película de Liliana Cavani, una película un poco lenta para algunos, que sigue la evolución de Francisco de ser un hombre rico hasta su conversión religiosa y humanista. Esta película está inspirada en la novela de Hermann Hesse, Peter Camenzind. Mickey Rourke en el papel de Francisco, y la mujer que -eventualmente llegaría a ser Santa Clara, es interpretado por Helena Bonham Carter

4. Reluctant Saint: The Life of Francis of Assisi novela de Donald Spoto (2002)

5. Flowers for St Francis (2005), libro de Raj Arumugam

6. Saint Francis & His Four Ladies (1970) libro de Joan Mowat Erikson

7. Brother, Sister (2006), tercer álbum de larga duración, de la banda de rock MewithoutYou, interpretando la canción El Sol y la Luna.

8. Sant Francesc (San Francisco, 1895), libro de 43 poemas sobre San Francisco por el poeta y sacerdote catalán Jacint Verdaguer, tres de los cuales están incluidos en traducción inglesa en: Selected Poems of Jacint Verdaguer: A Bilingual Edition, editado y traducido por Ronald Puppo, con introducción de Ramon Pinyol i Torrents (University of Chicago, 2007). Los tres poemas son: “The Turtledoves”, “Preaching to Birds” y “The Pilgrim”.

9. Frank McCourt's autobiography Angela's Ashes contiene referencias a San Francisco.

10. En Los Hermanos Karamazov, de Fyodor Dostoievsky, Iván Karamazov invoca el nombre de “nuestro Seráfico Padre” epíteto aplicado a San Francisco, para describir al stárets ortodoxo Zósima, padre espiritual de Alyosha. Referencia que bien puede no referirse a Francisco de Asís, pues el monacato ortodoxo se atribuye una “vida angélica”, y hay incontables referencias a los monjes como “llamas vivas” o “serafines”. Referencia semejante puede hallarse en el Fausto de Goethe (II, Acto 5, líneas 11918–25.


Escritos principales de San Francisco:



Canticum Fratris Solis o Laudes Creaturarum, Cántico del Sol.
Oración ante el Crucifijo, 1205 (en el dialecto original Umbrío, así como en traducción latina contemporánea).
Regula non bullata, Regla Primitiva, 1221.
Regula bullata, Regla Posterior, 1223.
Testamento, 1226.
Admoniciones.
Florecillas de San Francisco (en inglés, trad. de Rafael Brown), Doubleday, 1998. ISBN 978-0-385-07544-2



Para una lista completa, véase: [1].

Fuentes primarias para la vida de San Francisco.

1. Fray Elías, Epistola Encyclica de Transitu Sancti Francisci, 1226.


2. Papa Gregorio IX, Bulla Mira circa nos para la canonización de Francisco, del 19 de julio de 1228.


3. Fray Tommaso da Celano: Vita Prima Sancti Francisci, 1228; Vita Secunda Sancti Francisci, 1246 – 1247; Tractatus de Miraculis Sancti Francisci, 1252 – 1253.


4. Fray Julian de Speyer, Vita Sancti Francisci, 1232 – 1239.


5. San Buenaventura de Bagnoregio, Legenda Maior Sancti Francisci, 1260 – 1263.


6. Ugolino da Montegiorgio, Actus Beati Francisci et sociorum eius, 1327 – 1342.


7. Fioretti di San Francesco, Florecillas de San Francisco, fines del s. XIV: versión anónima italiana del Actus; la más popular de las fuentes, pero sumamente tardía, y por lo tanto de dudosa autoridad.


Para una lista exhaustiva de las fuentes, vid. [2].



Véase también:

1. Fraticelli
2. Orden del Santo Sepulcro, organización de laicos vinculada a la Custodia de Tierra Santa por los Franciscanos.
3. Hermano Sol Hermana Luna (1972), filme de Franco Zeffirelli
4. Oración de San Francisco de Asís, Oración ampliamente atribuida al santo, aunque, de hecho, no hay pruebas de que sea anterior a 1912.
5. San Junípero, uno de los seguidores originales de Francisco..
6. San David
7. St. Bonaventure University, escuela fundada en la tradición franciscana.
8. Franciscan_University_of_Steubenville, escuela atendida por la Tercera Orden Regular (TOR) en Southeastern Ohio.
9. University of Saint Francis (Illinois), escuela de tradición franciscana.
10. Saint Francis University (Pennsylvania)
11. List of people on stamps of Ireland
12. Santa Margarita de Cortona
13. Saint-François d'Assise, ópera de Olivier Messiaen
14. Society of Saint Francis Orden de Franciscanos dentro de la Comunión Anglicana.
15. The Flowers of St. Francis (1950), película de Roberto Rossellini
16. Christian mystics
17. Siena College
18. Saint-François (places called for Francis of Assisi in French-speaking countries)
19. Lynn Townsend White, Jr.
20. San Francisco, California, la más grande ciudad en el mundo con el nombre de este santo.

Referencias:


1. ^ a b c d e Chesterton(1924), p.126
2. ^ a b c d e f g h i j Paschal Robinson (1913). "St. Francis of Assisi". Catholic Encyclopedia. New York: Robert Appleton Company.
3. ^ a b c "Blessing All Creatures, Great and Small". Duke Magazine (2006-11). Retrieved on 2007-07-30.
4. ^ a b c Englebert, Omer (1951). The Lives of the Saints. Barnes & Noble, 529. ISBN 978-1566195164.
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